Dormir con tos es muy molesto, no solo para ti, porque evitarás que descanses como es debido, sino también para los que te rodean. Por ello, es frecuente hacerse la pregunta: ¿Cómo dormir para no toser?
Aunque existen fármacos, medicamentos y remedios naturales que nos ayudarán a dormir cuando tenemos tos, como especialistas en descanso vamos a ofrecerte una serie de consejos para dormir con tos, es decir, consejos muy útiles sobre cómo dormir para no toser.
¿Cómo dormir para no toser?: Índice
Consejos para dormir con tos
Con los cambios de temperatura es habitual resfriarse y con ello, que aparezca la molesta tos que nos impide dormir cada noche. Podemos pasar parte del día con tos, mocos o dolor muscular, entre otros síntomas del resfriado, pero por la noche estos síntomas pueden agravarse impidiéndonos descansar y haciendo que, al día siguiente nos levantemos con peor cuerpo.
Para evitarlo, vamos a ofrecerte una serie de consejos sobre cómo dormir para no toser:
Vigila tu postura a la hora de dormir
Con una postura correcta en la cama podremos dejar de toser incluso toda la noche.
La tos está provocada por la acumulación de mucosidad en la garganta y en el pecho, haciendo que no puedas dormir. Para evitarlo, lo mejor es dormir con el cuerpo inclinado lo máximo que puedas, es decir, dormir reclinado.
Para conseguir esta postura, puedes hacer colocar un par de almohadas bajo tu cabeza u optar por una almohada específica para dormir reclinado, como las siguientes:
Tómate un baño caliente
Si tienes tiempo para ti, siempre puedes darte un baño caliente antes de ir a la cama o en su defecto una ducha.
Por todos es bien sabido que, sumergirse en agua caliente alivia la congestión nasal, pero también inhalar sus vapores elimina los excesos de mucosidad, ayudándote a respirar mejor por la noche y en definitiva, toser menos.
Bebe agua
Beber agua ayudará a expulsar la mucosidad acumulada y a prevenir aquellos ataques de tos que nos impedirán dormir.
Mientras estés resfriado se recomienda evitar ciertas bebidas como el café y el té, y en su sustitución se recomienda beber agua o zumos de frutas naturales.
Haz gárgaras antes de dormir
Justo antes de meterte en la cama, te ayudará hacer gárgaras con agua caliente y limón. De esta forma, conseguiremos desinflamar la garganta ayudándonos a dormir mejor.
Utiliza un humidificador de ambientes
Has de saber que, tanto los ambientes muy fríos como los muy secos pueden llegar a incrementar la tos por la noche. Por ello, el uso de humidificadores de ambientes está especialmente recomendado para evitar que la garganta se reseque y ayudándonos con ello a toser menos.
Limpia tus fosas nasales con un aerosol salino
Los aerosoles salinos están especialmente indicados para eliminar la mucosidad de las fosas nasales y bronquios.
Este tipo de aerosoles compuestos por agua y sal, además de ayudar a expulsar la mucosidad también nos ayudan a disminuir la sequedad y a la vez eliminar los alérgenos que puedas contener en la nariz.
Toma chocolate negro
¿Sabías que el chocolate negro puede ayudar a suavizar la garganta irritada haciendo que tosas menos?
Algunos estudios han confirmado que la eficacia del chocolate negro es superior, en comparación con algunos medicamentos con codeína. Esto es debido a que, el chocolate negro contiene una sustancia llamada teobromina, la cual inhibe la actividad del nervio vago, causante de la tos.
No olvides cambiar tus sábanas
Por todos es bien sabido que, tanto las bacterias como los gérmenes se pueden acumular en las sábanas de la cama atacándonos cuando estamos durmiendo, provocando ataques de tos y problemas de respiración.
Por este motivo, en aquellos periodos de resfriados se recomienda cambiar las sábanas de la cama con mayor frecuencia y en el momento de lavarlas, hacerlo a altas temperaturas.
Si tu tos está provocada por alergia al polén o a los ácaros, también puedes colocar en tu cama sábanas hipoalergénicas, con las que toserás menos, como las siguientes:
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